El fútbol, un deporte que crea adicción

A la temprana edad de 3 años, e incluso a los 2 años muchos de nosotros ya nos hemos hecho aficionados al fútbol. Es muy posible que esto sea gracias a nuestros padres que nos lo han enseñado desde pequeños pero es un deporte que crea adicción, una adicción de la que no te puedes desenganchar hasta la muerte.

Muchos soñabamos con ser estrellas del fútbol desde la primera vez que vimos a nuestros ídolos darle patadas a un balón en un estadio lleno de gente gritando un nombre todos a coro. Ese es un sueño que muchas personas en el mundo hemos tenido pero que pocos han logrado, muy pocos. Algunos simplemente nos hemos tenido que conformar con jugar en equipos pequeños o simplemente con jugar con los amigos de vez en cuando pero...¿Y qué? Lo único que te debe importar es pasartelo bien haciendo lo que tú más deseas, en este caso el fútbol y eso nada ni nadie te lo va a arrebatar.

Volviendo a la infancia, me tengo que fijar en la palabra "aficionado". Todo buen aficionado al fútbol tiene su equipo favorito, un conjunto que le gusta más que los demás, que le atrae por su forma de jugar o por sus jugadores o por que simplemente es de tu propio país, ciudad o pueblo.
En el mundo hay un gran abanico de equipos, muy distintos los unos de los otros pero con un fin común: entretener.

Ya sea a nivel profesional o aficionado, creo que todos tenemos un balón en nuestra vida. Unos más grandes que otros pero esto es un vicio al que es inevitable no rendir homenaje.